agosto 2011

Crítica: El Planeta de los Simios: Revolución

Cuando escuchas sobre una precuela del Planeta de los Simios, no evitas tener algún sentimiento de desaprobación. Después del último intento que sólo provocó la ira de los fanáticos, las posibilidades de una nueva cinta fueron desechadas junto con el ridículo final alternativo del chango con cabeza de Abraham Lincoln.

Las esperanzas resurgen con esta versión que supera las expectativas a base de un excelente trabajo que hace la producción por hacer de los simios sean auténticos personajes capaces de iniciar una revolución. No muy afortunados resulta los actores humanos que si en algo acertaron es en justificar nuestra decadencia como la especie dominante del mundo, pero no es del todo su culpa, si no del libreto que nada más es un conjunto de justificaciones para lograr la gran rebelión, no existe ningún dialogo que sobresalga, o algún dilema ético y moral que implica desafiar a la naturaleza, aunque se trata de suplir con una breve advertencia por parte de Freida Pinto que de nada sirve y resulta ser como un zumbido de mosca fácilmente ignorado.

Existen tres elementos que sobresalen en lo que pudo haber sido un desastre: la compañia encargada de los efectos visuales WETA, la dirección de Rupert Wyatt y el talento de Andy Serkis.

Sin duda que la compañia de George Lucas a sido superada por el equipo de neozelandeses que nos ha sorprendido de nuevo no sólo con amontonar pixeles, si no con verdaderos personajes capaces de transmitir sus alegrías y miedos. En lo que otros han fallado, aquí a sido un acierto: sabía quienes eran los héroes, las víctimas y los villanos; a cada uno de los monos se les ha dado características que nos permitan identificarlos, claro que no es muy difícil distinguir entre un orangután y un gorila, pero sus motivaciones si lo fueron y son sorprendentes al momento de la batalla por la libertad. No todo es perfecto, llegan a existir momentos, en especial con las escenas de acción que aún no logran convencer pero comparado con todo lo demás que puede pasar como trabajo novato en alguna laptop, creanme que estos efectos visuales son de lo mejor que hay que no sea por James Cameron para Avatar.

Cesar-Planeta-de-los-Simios

La dirección de Rupert Wyatt se resiste a ofrecernos las mismas tomas y momentos artificiales del montón, para contenerse durante la mayoría de la cinta hasta su inevitable desenlace que resulta ser más emocionante que cualquier aglomerado de explosiones que hemos visto este verano. Hacia tiempo que no me sorprendía tanto las escenas de acción y eso se debe a que te importa lo que les sucede a los primates.

La estrella principal es el chimpancé llamado César, interpretado por Andy Serkis, quienes ustedes recordaran por darle vida a Golum. Es sorprendente lo penetrante que resulta el lenguaje visual y al mismo tiempo conmovedor como se desarrolla su destino de experimento a llegar ser líder de una revolución. No se que haya hecho Serkis, lo cierto es que te llegas a olvidar que es una creación digital.

Si no sobresale como ejemplar la cinta es porque no existe el material suficiente con los actores de carne y hueso para que sea un nuevo clásico. Al menos James Franco no arruina la cinta como me temía, pero deja mucho que desear ya que se la pasa haciendo caras y muecas, según que para expresar sentimientos. Ni el talentoso John Lithgow logra salvarnos de la falta de satisfacción que sus personajes nos provocan, comparados a lo revolucionarios monos.

Aún con sus deficiencias, es una verdadera sorpresa está nueva versión y lo mejor es que te da ánimos para ver la secuela.

Trailer El Planeta de los Simios: Revolución, El Origen del Planeta de los Simios

Estrenos retardados

Imagen del sitio pinchepelicula en 2011

¿Cómo es posible que el estreno de Planeta de los Simios y Cowboys vs Aliens sea primero en Argentina y no al mismo tiempo en México?

Ha sido un verano plagado de estrenos retardados no sólo por una semana, si no por meses, recordándome tiempos en donde el mercado latinoamericano no tenia la importancia en los bolsillos de las casas productoras. Claro ejemplo han sido Linterna Verde y Súper 8, que fueron expuestos al público desde el mes de junio y apenas la publicidad anuncia con fanfarrias que vayamos al cine los mexicanos a verla este fin de semana como si se tratara del evento del año.

¿Qué paso con la necesidad de ganarle a la piratería? De por si que los boletos del cine no son tan económicos y uno tiene que buscar una lugar feito con precios accesibles para que rinda llevar a toda la familia; luego soportar que los estrenos ya estén siendo vendidos en las calles a tres días de que en Estados Unidos. Creo que las cadenas de cines se han vuelto conformistas, ya prefieren tener un margen de ganancia establecido y según ellos para extenderlo prefieren tener espaciadas las películas taquilleras.

Al menos este viernes en México habrá auténticos estrenos con «Noche de Miedo» (Fright Night) y las producciones nacionales «Así es la Suerte» y «El Mural de Siqueiros» (co-producida con Argentina). Lo mismo no se puede decir de Loco y Estúpido Amor que tuvo su estreno el 29 de julio.. o la película El Anticristo ( La posesión de Emma Evans), que por más que le cambien el nombre no cambia el hecho que su estreno es del año pasado.

El internet nos ayuda a comunicarnos sobre lo más reciente en el mundo y me temo que las casas productoras se han quedado atrás imponiendo barreras de idiomas y distancias que se están volviendo inexistentes con el paso del tiempo. Se han quedado rezagados con ideas de mercados que sólo les esta perjudicando en su margen de ganancias al negarse a la integración de las fechas de estrenos. Una semana o hasta dos es aceptable, pero meses es un insulto.

Crítica: Medianoche en Paris

No soy especialista del gran Woody Allen. Cuando intente ver «Annie Hall» estaba tan ocupado, que dos días después tuve que regresar el DVD que había rentado. Aún con tan limitado (escaso, tirandole a ningún)  conocimiento del estilo que tiene el director, no es difícil darse cuenta de las cualidades positivas que tiene el filme.

Desde el principio es posible perderse en diálogos con temáticas no aptas para los desconocidos; desde la política norteamericana, luego las aparentes inocentes discusiones de una joven pareja de visita en la romántica ciudad de Paris, para después terminar en conversaciones con personajes culturales reconocidos donde el inconveniente es que se supone que están muertos. Esto último para que sea posible no necesito de explicaciones científicas si no te estilo para imponer la fantasía de ver al carismático Owen Wilson casi orinarse de emoción al conocer a sus ídolos.

Es difícil de dirigir esta cinta porque se requiere cierto conocimiento de tan prestigiadas figuras como: Salvador Dalí (Adrien Brody), Man Ray (Tom Cordier) , Pablo Picasso (Marcial Di Fonzo Bo), Luis Buñuel (Adrien de Van); y podría continuar. Esto es una autentica carta de amor por parte de Allen a las personalidades como lo es a la misma ciudad de Paris. Su dirección se vuelve en una constante misión por demostrar la magia de diferentes eras de creación humanista , en donde no se detiene con explicaciones para los incultos que sólo pueden apreciar la belleza que es el arte del cine con cada escena.

El trabajo del actor Owen Wilson es una reafirmación de sus fortalezas al transmitirnos alegría, inocencia e ingenuidad al mismo tiempo. Es un grito desesperado al talento que tiene y que solo se ve interrumpido por la falta de elección de adecuados libretos a los que supongo a elegido por necesidad de empleo. Ni que decir del resto del elenco que aún con sus breves apariciones, evitan ser actores jugando con disfraces al imponer seriedad al interpretar cada una de las grandes figuras.

No puedo negar que la película se vuelve inaccesible para aquellos consumidores frecuentes de producciones Hollywoodenses que se conformar con proporcionar emociones viscerales. Se requiere gusto por este tipo de cine que no busca complacer a la mayoría si no que se impone con su singularidad e increíble belleza. Muy difícil lograr que sentimientos tan positivos y más cuando se trata de la fantasía que involucra volver atrás en el tiempo, sea catalogados como un producto artificial, esto es una obra de amor y se nota en el filme.

Trailer Medianoche en Paris

El Cuarentón de Cinepolis

Tenía cinco años cuando a la mitad del camino de la ruta del camión que se dirigía al centro de la ciudad, había un enorme terreno baldío. En ese entonces nunca me imagine que iba a ser utilizado para un centro comercial, ni mucho menos para el primer Cinépolis de Organización Ramírez.

En Tijuana sólo había dos Multicinemas y dos Cinemas Gemelos para toda la ciudad. Ya se imaginaran la novedad que fue en 1994 cuando Cinepolis abrió sus puertas con diez salas de cine. Nada que ver con lo que es ahora: eran dos grandes salas con capacidad de al menos 500 personas con asientos al ras del piso ( tipo estadio eran inexistentes en esos tiempos) y ocho mini salas de cine con capacidad para lo que supongo eran máximo 80 personas, las paredes del lobby estaban pintadas con color rosa claro, los interiores de las salas eran café oscuro al igual que la tapicería de los asientos.

En ese Cinépolis llegue a ver: Día de la Independencia, El Rey León, Los Picapiedra, Toy Story, La Súper Risa en Vacaciones 8 , Cuidado Bebe Suelto, Siete Años en el Tibet, X-Files , Lobo Americano en Paris y Los Vengadores. De ahí en adelante , la apertura en 1998 de un nuevo cine por parte de una cadena norteamericana ya no hizo tan atractivo el ir a Plaza Carrusel.

Con el paso de los años Cinépolis mejoró su imagen corporativa, añadiendo nuevos colores, salas tipo estadio, más de una dulcería , grandes pantallas. Sus directivos hundieron sus anteriores conceptos de Multicinemas y comenzaron a invadir las ciudades con la novedad que fue las salas múltiples. El éxito no se ha hizo esperar y actualmente todas las ciudades de México cuentan con al menos un Cinepolis.

Ahora con gran orgullo en cada inicio de película un promo me avisa del gran logro que ha sido la globalización del innovador concepto de salas múltiples. Luego se da el lujo de utilizar a grandes cadenas productoras para felicitarlos con sus actores pronunciando equivocadamente con «Cinepole», el Rayo McQueen deslizándose sobre el logotipo, hasta los Pitufos con su odiado doblaje planeando una pitufiesta.

Si hay que dar gracias, festejar y sentir el orgullo de una empresa mexicana logrando sobresalir en el extranjero. Ha sido el esfuerzo de centenas de mujeres y hombres que a través de los años han logrado con su innovación llegar a 40 años de existencia. Es por eso que les recomiendo que abandonen la menopausia y logren ofrecer palomitas de calidad en la dulcería, salas de cine limpias, baños higiénicos, tapicería en adecuadas condiciones, una alfombra reluciente sin que tenga un caminito de tierra que resulta más benéfico al momento de salir que las odiadas luces de emergencia en el piso que no funcionan; y sobre todo una calidad de imagen impecable en la pantalla que no haga que me arrepienta de haber ido al cine.

Si fui muy exigente en lo anterior es porque en aquel lejano 1998 deje de asistir al Cinépolis a cambio de Cinemastar y fui testigo de una experiencia diferente: asientos reclinables, salas limpias, calidad de imagen , sonido THX, podías llenar dos veces tu envase gigante de palomitas, agregar mantequilla (aunque después me dolía el estomago). Es una lástima que haya quebrado la empresa en Estados Unidos y hayan tenino que vender las salas de México a Cinépolis, que por lo visto no han aprendido nada y se ha dedicado a vender su marca multiplicándose como plaga en vez de mejorar.

Cinépolis debe ser sinónimo de excelencia, hay aquellos que piensan que es lo máximo y sin ser malinchista deseo que así lo sea. Existe mucho que pueden mejorar y me entristece que descuidan a la mayoría por unas cuantas salas IMAX y 4D con el fin de aumentar su utilidad.

Sin embargo. ¡Felicidades Cinépolis!

Trailer Batalla Naval (Battleship)

Me da la impresión que hemos visto toda la trama en tan sólo dos minutos, pero gracias a la  práctica Wikipedia que me ha convencido más que el trailer que acabo de ver, me han entrado dudas de que tanto pueda funcionar que veamos la estrategia de los extraterrestres como los humanos. Los guionistas tienen un gran trabajo que realizar para que los $200 millones que cuesta la producción, no se hundan en el fondo del mar.

No existe problema que los guionistas se inspiren en un juego de mesa para realizar el libreto, si algo nos ha enseñado Piratas del Caribe, es que cualquier concepto puede funcionar mientras sea entretenido.

Me preocupa que aparezca Liam Neeson. Espero que no se este abaratando con esta película, como lo hace una y otra vez Nicolas Cage con sus cinco películas por año que no duran ni dos semanas en cartelera.

Mientras hay que esperar para que el siguiente año nos vuelva ha invadir chatarra espacial.

Mejor Momento: El Rey León

Imagen de la película animada El Rey León

Con el relanzamiento de la versión en 3D. Es justo evaluar lo que en mi opinión es el mejor momento de la película. El inconveniente con estos ya clásicos es que existen varias escenas que nos conmovieron en su tiempo ya sea con su belleza o impacto: desde el icónico inicio con peregrinaje de los animales del reino animal ha rendir tributo al nuevo heredero del rey, hasta la trágica muerte de Mufasa de manos de su malvado hermano.

Pero después de todo , el mejor momento es cuando Mufasa se aparece ante Simba para recordarle quien es, y por lo tanto reclamar su lugar en el mundo. Sin esta conmovedora escena, todo se hubiera caído en pedazos, era necesario un gran motivo para que el ya adulto Simba superara sus miedos y se decidiera por regresar al reino para enfrentar a Scar. Los creadores superan el obstáculo con autentica magia cinematográfica digna de ser parodiada hasta en los Simpsons.

Si nos ponemos a valorar El Rey León, es una producción que se toma demasiadas libertades al humanizar a los animales que habitan en la savanah africana. Desde que todos conviven sin distinción al celebrar a Simba sin que uno sea asesinado por el otro, hasta el respeto a la jerarquía de un felino como si no existieran seres de mayor tamaño para derrocar el reinado.

Simplemente la película es una de las mejores jamás producidas por la cantidad de sentimientos que logra transmitir. Después de 17 años, es sorprendente que aún pueda causar uno que otra lágrima y sonrisas; sin importar si es en 3D.