Algunos actores son garantía de que al momento de asistir al cine la experiencia no sea una total decepción. Otros simplemente entendemos que eligen sus personajes con tal de recibir un salario sin importar la calidad de la producción. En el caso de Nicolas Cage es una mezcla de ambos casos, no sabes de que te va a tocar, pero considerando la calidad de actor que es Alfred Molina me hace pensar que está producción aspiraba a más que una ignorada cinta de verano.
Quizás fue la temática de brujo – mago que se ha vuelto muy común últimamente o los avances que no ofrecen demasiado atractivo. Lo que hubiera sido, es simplemente un producto palomero más del productor Jerry Bruckheimer ahora con la ayuda del equipo que nos trajo National Treasure. Así que sólo se pueden esperar persecuciones, explosiones y pésimas interpretaciones de romances forzados para alargar la historia.
La inspiración de la cinta viene de la clásica escena con Mickey Mouse haciéndola de brujo en Fantasía. Esto no es de todo malo considerando que la Piratas del Caribe fue concebido de un juego mecánico del parque Disneylandia. Lo que sucede es que el guión cae en la típica estructura del adolescente sin futuro que descubre su vocación de gran Mago, encuentra a su maestro, se enamora y salva al mundo.
Nicolas Cage y Alfred Molina hacen lo que pueden con un libreto que no da más que para constantes persecuciones con el fin de llenar la duración requerida y así te de hambre y vayas a comprar palomitas. Las escenas son llevadas a cabo con toda la adecuada tecnología digital, energía y diseños necesarios para mantenerte atento, es cuando se detiene el guión a enfocarse en la vida del protagonista cuando empezamos a desear que algo explote. No hay mejor ejemplo que el romance forzado que tenemos que soportar del adolescente de Dave (Jay Baruchel) con su amiga de la infancia, la cual sirve de distractor en el aprendizaje del futuro brujo.
La falta de interés en los problemas de los personajes es inevitable. Se nos expone a los antecedentes a través de recuerdos y uno que otro diálogo que no provocaron en mí las suficientes simpatías para que me importaran sus angustias. Todo es tan inventado y ficticio que ya para el clímax te sientes agradecido que todo esta apunto de terminar de la forma más predecible posible.
No esta del todo mal la cinta. A momentos te entretiene con persecuciones y una que otra escena de Cage y Molina intentando hacerse daño, pero el resto es lo típico de lo que hemos visto una y otra vez.
Estoy de acuerdo con tu post la película es muy repetitiva i típica ya vista en otras películas que si el joven mago etcetera …. No recomiendo que vean la película